La apuesta para esta nueva etapa ha sido Philippe Montanier, un técnico francés de 46 años, y que en su país es considerado como uno de los técnicos con más proyección del continente europeo. Jugó como portero en varios equipos franceses y tras su retirada empezó su andadura como segundo técnico. Tras formarse en el Toulouse, Bastia y en la selección de Costa de Marfil, en 2004 coge las riendas del Boulogne, un equipo francés al que ascendió en 5 temporadas de la tercera división francesa a la Ligue 1. Tras conseguir este hito ficha por el Valenciennes en 2009. El primer año consigue el 10º puesto en la tabla, lo que es la mejor clasificación del Valenciennes en toda su historia, causando una gran sensación en el fútbol francés. Ha conseguido que un equipo humilde despliegue un fútbol de primer nivel, enamorando a todo el país y comparándolo con el mismísimo Barcelona por su juego alegre y valiente.
Los equipos de Montanier suelen ser equipos llenos de jugadores salidos de la cantera, a quienes da confianza para poder explotar lo mejor de cada jugador. No mira la edad de los jugadores, y no le tiembla el pulso a la hora de sacar al campo nuevas generaciones. En el Boulogne hizo debutar a un chaval de 15 años en el primer equipo, y en esta última temporada en el Valenciennes ha subido al primer equipo a 5 jóvenes de la cantera, 2 de ellos de 18 años, que han disputado casi todos los partidos de la segunda vuelta. Su esquema de juego habitual es el 4-3-3 y sus planteamientos se basan en la posesión de balón y juego poco especulativo. Le gusta el juego ofensivo, muy combinativo, y muestra de ello es que el 95 % de los goles del Valenciennes esta temporada han sido en jugada colectiva. Además sabe hacer frente a los grandes equipos, como demostró en su enfrentamiento frente al Lille, campeón de la Liga y Copa francesa, en el que empataron a uno.
Visto esto, la Real comienza un proyecto ambicioso de cantera, en la que busca que la proyección, ambición y conocimientos del nuevo técnico le lleven a conseguir éxitos pasados. La idea es que como hace décadas, la gran mayoría del equipo este formado por chavales de la cantera y que los jugadores que vengan de fuera marquen las diferencias. Ya que la crisis económica no da lugar ha grandes desembolsos, la única manera de asegurar un futuro es cuidando la cantera y dando oportunidades a los jóvenes jugadores que hay en las categorías inferiores que trabajan en Zubieta.
No sería de extrañar que en unos años la Real contase con una plantilla parecida a esta:
Porteros: Zubikarai (27 años) y Mandaluniz (24).
Defensas: Carlos Martinez (25), Cadamuro (23), Demidov (24), Mikel Gonzalez (25), Iñigo Martinez (20), Jon Gaztañaga (20), Morgado (21)
Centrocampistas: Markel Bergara (25), Asier Illarramendi (21), Javi Ros (21), Rubén Pardo (18), Alex Albistegi (24), Aitor Castro (18), Zurutuza (25), Xabi Prieto (27), “Txomin" Barcina (20)
Delanteros: Griezmann (20), Pablo Hervias (18), Kenan Kodro (17), Iker Hernández (17), Agirretxe (24), Diego Ifrán (24)
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